Agustín Brites, alumno de la UTN, fue parte del equipo que desarrolló un proyecto de IA con propósito social que llegó al segundo puesto en una competencia mundial.
Agustín Brites es oriundo de Puerto Tirol y, con 24 años, cursa el 5º año de la carrera de Ingeniería en Sistemas de Información en la Facultad Regional Resistencia de la Universidad Técnica Nacional (UTN).

Su ingreso al mundo universitario no fue sencillo, ya que durante la pandemia, atendía una barbería para poder mantenerse, mientras cursaba sus materias con una computadora del gobierno.
El punto de inflexión llegó con la beca «Potenciamos tu talento», impulsada por Banco Galicia y gestionada por Asociación Demos.
«Cuando me la aprobaron fue una alegría enorme. Pensé: «Voy a poder ahorrar para comprar mi primera compu, qué bueno»», recordó emocionado.
El apoyo no solo fue económico: «El respaldo académico fue excelente. Me ayudó a ordenar y priorizar mis materias, a ser mejor profesional y persona», destacó.
El vínculo con su tutora, Lucía de Demos, fue otro sostén clave. «A veces estudiar y recibir un mensaje de ella preguntándome cómo estaba, dándome consejos, escuchándome, era muy importante. Fue un soporte sincero en todo el proceso», reconoció.

DEL CHACO A CHINA GRACIAS A UNA APP
Bajo el ala de la UTN y con el impulso de la beca, Agustín integró uno de los dos equipos que representaron a Argentina en la Final Global de la Huawei ICT Competition, en Shenzhen, China.
Junto con Florencia González, Ezequiel Machuanin y el docente César Acuña presentaron HarmonIA, una aplicación que utiliza inteligencia artificial para anticipar y prevenir deterioros en la salud mental de las personas.
«La idea surgió por experiencias personales de Ezequiel, que ya venía pensando en una solución con impacto social», explicó Agustín.
La competencia atravesó tres etapas: nacional, latinoamericana y global. «De cuarenta universidades, pasamos a ser uno de los tres equipos finalistas en Argentina», y amplió contando: «Después ganamos la instancia de Latinoamérica y Caribe; y, ahí sí, clasificamos al mundial».
La experiencia en China lo marcó: «Fue muy linda, porque conocimos estudiantes de otros países, compartimos mucho entre nosotros. El intercambio cultural se dio de forma natural y eso lo hizo más rico».

EDUCACIÓN PÚBLICA Y ACOMPAÑAMIENTO HUMANO
Agustín ingresó en 2020 a la UTN como estudiante de Ingeniería Electromecánica, pero al año se cambió a Sistemas por su creciente salida laboral.
Actualmente, además de estudiar, trabaja como programador para FPA Software, una empresa de Buenos Aires.
Desde su propia vivencia, no duda en afirmar que «gracias a la educación pública y a las becas que apoyan a alumnos, estudiar una carrera universitaria está al alcance de cualquier joven con pocos recursos».
Su mensaje es claro: «Lo único que tenés que hacer es ingresar, estudiar, ser responsable y constante, y solo se va a ir acomodando todo».
La beca «Potenciamos tu talento» fue, en su caso, una verdadera herramienta de movilidad social. «Soy una persona con escasos recursos, y ser seleccionado significó mucho. Fue una oportunidad concreta que me cambió la vida», concluyó.