El fiscal Marcelo Soto confirmó que la acusada, de 27 años, había planeado el hecho durante semanas. El bebé fue recuperado rápidamente y la mujer será imputada por sustracción de menores, un delito que prevé hasta 15 años de prisión.
Presidencia Roque Sáenz Peña quedó conmocionada tras el intento de sustracción de un bebé recién nacido en el hospital 4 de Junio, en un hecho que sorprendió por su planificación. La responsable, una mujer de 27 años, se disfrazó de enfermera y logró llevarse a la criatura tras engañar a la madre. El bebé fue recuperado poco después, sano y salvo.
El fiscal Marcelo Soto, a cargo de la investigación, explicó que la acusada adquirió previamente una chaquetilla de enfermera a través de un sitio de compraventas, lo que revela que había planificado el hecho con antelación. “Esta mujer venía desde hace semanas haciendo tareas de inteligencia dentro del hospital”, aseguró el fiscal.
La madre del bebé había llegado al hospital desde una localidad cercana (Charata o La Breña) y dio a luz el 10 de junio. Al día siguiente, la falsa enfermera se presentó en la sala de maternidad, tomó al recién nacido con la excusa de realizarle controles médicos y desapareció. Poco después fue encontrada oculta en un baño del propio hospital.
Un embarazo falso y una trama por esclarecer
Soto confirmó que familiares de la acusada declararon que la mujer había mentido durante meses sobre un supuesto embarazo. Incluso, algunos parientes le habían hecho regalos por el bebé que supuestamente esperaba. “Estaba a la pesca. No era que buscaba a este bebé en particular”, explicó.
Respecto a posibles trastornos psicológicos o psiquiátricos de la acusada, el fiscal indicó que aún es pronto para determinarlo. Está previsto que la mujer sea sometida a pericias médicas en los próximos días. También será evaluada su pareja, que ya fue detenida junto con ella.
Los tres hijos que tiene la acusada fueron puestos a disposición de la Unidad de Protección Integral (UPI) y entregados a un abuelo para su cuidado.
Investigación en curso
La Fiscalía secuestró los teléfonos celulares de la mujer y de su pareja, que serán analizados por el Gabinete Científico del Poder Judicial. “Si hay algo más detrás de esto, debería aparecer allí”, señaló Soto. No se descarta que haya más personas involucradas o que se trate de parte de una red.
La imputación será por el delito de sustracción de un menor de 10 años (artículo 146 del Código Penal), con una pena prevista de entre 5 y 15 años de prisión. “El delito está consumado. No fue tentativa: el bebé fue sacado de la esfera de custodia de su madre”, precisó el fiscal.
En los próximos días continuarán las declaraciones testimoniales del personal del hospital y de los familiares involucrados.
