
El consagrado pivot, oriundo de Castelli, se retiró del básquet profesional a sus 51 años, jugando en la Tercera FEB, cuarta categoría de España, con el Salliver Fuengirola. Su último juego fue en un equipo que compartió junto a su hijo, Thomas Wolkowyski.

En sus redes sociales, el «Colo», integrante de la mítica Generación Dorada del básquet argentino y campeón olímpico en Atenas 2004, compartió sus sensaciones al momento de colgar las zapatillas. «Llegó el día de despedirme de las canchas junto a mi hijo Tomy. Gracias a este deporte tan hermoso que me dio ese lujo de jugar junto a él una temporada en CB Salliver», escribió en Instagram.

«Gracias a cada uno de los integrantes del equipo por ayudarme a poder jugar un año más a este deporte tan hermoso. Serán una parte de mi hermosa historia», agregó.
En su partido final, el ayuntamiento de Fuengirola le entregó una plaqueta de reconocimiento con un emotivo mensaje: «En reconocimiento a Rubén Wolkowyski, por tu impagable ejemplo de amor por el baloncesto, y los valores que fielmente has representado en tu carrera, hasta el último día: compromiso, sacrificio, disciplina y compañerismo. Fuengirola es tu casa, Colorado. Gracias por tanto».






